miércoles, 12 de enero de 2011

“EL GRAN SICARIO DEL PAIS....”

***SNN

“El gran sicario del país: el accidente de tránsito”
Ana Karina López - Revista VISTAZO

 Foto: El DIARIO.com.ec
El 24 de diciembre murieron 28 adultos y 11 niños en un bus interprovincial Reina del Camino. Entraron así en las estadísticas de las principales causas de muerte en el país.


Entrevista
Víctor Jiménez, de la asociación cívica Covial, desmenuza las causas de esta espeluznante lacra y su asociación con el poder.


Cada fin de año llega la triste constatación del aumento de víctimas por accidentes de tránsito, a pesar de varias campañas y la nueva Ley de Tránsito. ¿Por qué no hay resultados?
Porque no tenemos autoridades con capacidad para hacer cumplir la ley. Si a eso le agregamos el problema de cultura y actitud de los ecuatorianos, estamos en la lona.


El 31 de marzo pasado Covial y Justicia Vial entregaron una denuncia a la Fiscalía por el tráfico de rutas y frecuencias, apuntando a autoridades y sindicatos. ¿Es esta promiscuidad la que generó el espiral creciente de accidentes?
Es parte de la espiral. Esa denuncia está en indagación previa. Además tenemos otros cinco procesos judiciales en contra de sindicatos profesionales que emitieron licencias de conducción de manera irregular.
Hasta mayo de este año creemos que todas nuestras denuncias habrán pasado a los juzgados y habrá que batallar con las sentencias para los culpables.


¿Espera sanciones?
Debemos tener esperanza. La corrupción en nuestro país campea, la hay en la administración de justicia y tememos que los jueces puedan ser comprados.
Los señores dueños del transporte tienen mucha plata, poder e instrumentos para disuadir a la gente. Pero tengo 55 años de edad, he vivido a plenitud y ahora voy a dedicarme a perseguir a los corruptos a costo de mi vida.


¿En este Gobierno se ha dado una mayor voluntad política para regular al sector o hay el sometimiento de siempre al poderoso gremio de los choferes?
Es el mismo, aquí no ha pasado absolutamente nada y los resultados se ven: 11 personas mueren cada día en accidentes de tránsito. Son la primera causa de muerte de niños de 5 a 14 años y la segunda causa en el segmento de 15 a 49 años. ¡Coman fritada, coman hornado, no se preocupen por el colesterol, no morirán por eso, sino por los accidentes de tránsito!, lo dicen las estadísticas. El aparato productivo pierde cerca de 600 millones de dólares anuales por accidentes de tránsito. La falta de seguridad vial en el Ecuador es multi causal, agudamente compleja y corrupta. Por lo tanto las soluciones tienen que ser multidisciplinarias, intersectoriales y todos tenemos que trabajar por un solo objetivo, para eso se necesita una estrategia nacional de seguridad vial. Pero en el Ecuador no existe. Estamos cansados de hablar con todas las administraciones, pero no les interesa y coquetean con los grupos de intereses. Ante ellos dan la venia, con ellos negocian, con ellos se reúnen.


¿El verdadero poder político son los choferes?
A los sectores de la transportación y de la conducción profesionales ¿quién los va a atacar si los presidentes les tienen temor? Ellos se jactan de que botan y ponen gobiernos. Así es el poder, y el dinero que tienen. El presidente Correa, el único presidente que tiene la decisión política –yo lo admiro– quiere cambiar, pero no tiene el equipo.


En cuatro años no ha habido la decisión política, a los choferes no los ha tocado.
Presidente Correa: no tenga miedo, no lo van a botar. Usted es la única persona a la que podemos acudir. En el mundo del transporte y del tránsito obligue a las autoridades a que cumplan y hagan cumplir la ley.


El presidente Correa colocó el origen del accidente de Manabí en la irresponsabilidad del chofer.
Esto tiene un origen político que no ha sido resuelto por las autoridades. Tanto que se habla del sicariato… el sicario número uno en el Ecuador se llama accidente de tránsito.


El 70 por ciento de los buses incumple con las normas elementales de seguridad. Usted aseguró a El Universo que las autoridades “son inoperantes, incapaces de aplicar la ley”. ¿Cuál es el origen de la inoperancia?
La promiscuidad. Este es un país de nadie. Un ejemplo es lo que sucede con las carrocerías: seis de cada 10 buses que circulan en el Ecuador no cumplen ninguna norma. La estructura del bus según la norma tiene que tener cada 30 centímetros una sercha (tiras), en la realidad se hace cada 80, 120 y ciertos infames carroceros las ponen cada dos metros. En la carrocería del Reina del Camino que se accidentó, estaban cada 88 centímetros y podridas. Otro caso, los vidrios: seis de cada 10 buses circulan con vidrios crudos que cuando se rompen se convierten en dagas, las personas mueren degolladas. Nadie controla que se cumpla la norma INEN. Se denuncia y no pasa nada.


¿Quién debería controlar?
La Comisión Nacional de Tránsito (CNT), pero no funciona para nada, fue solo un cambio de nombre. Necesitamos técnicos y un líder que respete y haga respetar la ley.


Uno de los problemas del Consejo de Tránsito era que estaba constituido en su mayoría por representantes de los interesados, es decir de los choferes, y esto cambió en la CNT…
Y ahora el Movimiento PAIS firmó un acuerdo con ellos para que en el proyecto reformatorio ellos vuelvan a ser parte, y están muy contentos. No podemos permitir que eso pase.


En Montecristi se aseguró que la nueva Ley de Tránsito era la mejor de América Latina, sin embargo luego de dos años de su aprobación la situación empeoró y ya se plantean reformas. ¿La ley no pasó la prueba?
Nosotros la defendemos. Las únicas reformas que caben son las necesarias para compatibilizarla con la Constitución, ya que la ley salió antes que la Constitución. Mi mensaje a los asambleístas es: dejen de coquetear con los grupos de poder y legislen en función de los casi 14 millones de ecuatorianos.


¿Cómo manejan los choferes su poder en provincia?
Son capataces y manejan a la patada a sus afiliados y a las autoridades, negocian entre gallos y medianoche. El resultado de este poder se ve en las estadísticas: el 93 por ciento de los accidentes de tránsito es causado por la persona (peatón, chofer o pasajero); de ese total el 57 por ciento tiene como responsable al conductor; y de este universo el 60 por ciento es por culpa del chofer profesional. Por eso el chofer profesional no tiene que sentirse ofendido que el país lo haya estigmatizado como el máximo culpable, porque es el máximo culpable. Es la consecuencia de una autoridad que imponga la ley. El 7 de agosto teníamos que tener el plan de rutas y frecuencias, que la ley obliga a crear a la CNT, ahora todos trabajan ilegalmente porque no hay plan. Las frecuencias son propiedad del estado, que las da gratis a las cooperativas y estas las comercializan.


En los últimos 10 años lideramos la lista de América Latina por accidentes de tránsito. ¿Y este año?
A lo mejor tendremos una medalla de oro... Aún no hay las cifras de 2010, que van a superar al anterior. En 2009 en relación al año 2008 los accidentes crecieron en más del nueve por ciento. Respecto al histórico desde el año 2000, ascendieron en 25 por ciento. Hubo 15 por ciento más de víctimas en 2009 que en 2008; y del histórico, un 60 por ciento. En 2009 hubo 16.958 víctimas, según los partes policiales. ¡Con el SOAT, que nos da por primera vez cifras reales, la cifra sube 43 mil víctimas! El flagelo social número uno se llama accidente de tránsito.

Nota: Pedimos disculpas a nuestros lectores y familiares de los fallecidos por la impactante imagen publicada.

El Editor: SNN

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